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Caja con una tapa de poca altura que encaja en el asiento retranqueado preparado en la boca. Se usaba para guardar todos los utensilios necesarios para el juego de acertar los aromas de los inciensos (kodo): herramientas para trocear las maderas olorosas, cajitas para guardar inciensos, hornillos, fichas, tabla para escribir los resultados, etcétera. Originalmente debía de tener una bandeja interior. Este tipo de caja se denomina kogubako.

Está tratada con laca negra, encima de la cual se desarrolla la decoración con la técnica de makie dorado. Los motivos son árboles de pino, bambú y ciruelo que crecen del suelo. Se logran distintos matices de dorado con la combinación de polvo de oro y de plata, y se emplean diferentes tamaños de polvo de oro, finos y menos finos, e incluso trozos cuadrados del mismo metal (kirigane). Hojas o flores que actualmente son grises eran plateadas inicialmente. El trabajo es fino y sigue el modo tradicional del makie.

Entre la ornamentación se encuentran dos tipos de blasones familiares (mon). Uno, llamado moriyamamitsu-aoi, consta de tres hojas de malvácea dentro de un octógono, y el otro es una cruz gamada que apunta hacia la izquierda dentro de un círculo, y se denomina maru-ni-hidari-manji. El primero debió de pertenecer a algunos miembros de la familia Tokugawa. La presencia de dos escudos nos sugiere que la caja, y supuestamente el conjunto completo para el juego del kodo, fueron elaborados con motivo de un matrimonio, formando parte del ajuar de la novia, en el periodo Edo, probablemente ya en el siglo XIX. Este objeto era uno de los imprescindibles para una novia de clase alta, del rango de los señores feudales. (Yayoi Kawamura, 2014)

Bibliografía seleccionada

• Arte japonés y japonismo [Cat. exp.]. Bilbao, Bilboko Arte Ederren Museoa-Museo de Bellas Artes de Bilbao, 2014. pp. 427-428, 528, 532-533, 540, n° cat. 141.